Buenos días,
Os envío esta opinión por si os gusta y queréis publicarla. Muchas gracias!
Escribo esto como un desahogo personal y una crítica social, más allá de si las decisiones políticas que se están tomando son o han sido las adecuadas o no.
Por poner en contexto, soy una persona de riesgo que desde que empezó la pandemia he intentado llevar de la forma más estricta posible las recomendaciones y normativas (incluso las que no estaba del todo de acuerdo con ellas). Ya no solo por protegerme a mi, si no por proteger a los demás.
La situación hace ya tiempo que está empeorando. Ayer leí que la OMS, no entiende que está fallando en España para que tengamos otra vez un número de contagios tan elevado, y desde mi humilde opinión me gustaría contestarles.
Estamos así porque sigo viendo mucha gente sin mascarilla o con ella mal puesta por la calle. A TODOS nos molesta mucho llevarla, pero mucha gente no tiene la decencia de ponérsela ni cuando te cruzas con ella. Ya no hablamos de grupos de gente joven, que rara vez veo uno que lleven todos mascarilla o no estén en corrillo fumando.
En cuanto a los bares, llevo sin sentarme en uno desde marzo simplemente porque la mayoría no considero que cumpla con las condiciones. No quiero meter a todos en el mismo saco, porque entiendo que además son uno de los sectores más perjudicados, pero en este tiempo he visto de todo. Dueños y camareros sin mascarilla o con ella mal puesta, terrazas que ahora tienen más espacio, y lo aprovecha para poner más mesas pero no mantienen la distancia de seguridad entre ellas, Camareros brindando con unos comensales, aglomeraciones de mas de 20 personas en la puerta de un bar, gente que parece que se sienta en la terraza y se olvida de lo que está pasando cigarro en mano y hasta agentes de policía en la puerta de un bar sin mascarilla y fumando cuando se supone que son los que nos tienen que proteger de estas situaciones. Ayer mismo entrevistaron en la tele a varios dueños de bares en Madrid quejándose por la nueva normativa mientras tenían la mascarilla por debajo de la nariz, y sinceramente, si no cumples con algo tan sencillo ni para salir por la tele pierdes el derecho de quejarte.
En las puertas de los colegios sigo viendo a muchos padres de tertulia después de dejar a su hijo, y a profesores fumando todos juntos en la acera de enfrente sin ningún tipo de distancia. Nos debería dar vergüenza que sean los niños los que mejor cumplan las medidas.
Mis amigos me siguen mandando fotos en una comunión, boda, bautizo o comida en la que aparecen todos sin mascarilla. “No pasa nada, es solo un momento y estamos al aire libre” me decía un amigo, y ahora es su madre la que está ingresada en la UCI.
En definitiva, estamos así porque nuestra sociedad es así. No somos solidarios ni con nuestros seres queridos en el momento en el que más deberíamos serlo, cuando lo único que nos han pedido es llevar mascarilla y mantener la distancia de seguridad.
Ojalá que no, pero si llega el momento de volver a confinarnos, esta vez no se le puede echar la culpa al político de turno. Esta vez es culpa de todos, una derrota de toda la sociedad que aún sabiendo las miles de muertes que llevamos por culpa de esta pandemia, en muchas ocasiones seguimos haciendo lo que nos da la gana.
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