CONCENTRACIÓN DE MAUTHAUSEN
El 5 de mayo conmemoramos el Día de Homenaje a los españoles deportados y fallecidos en
Mauthausen y en otros campos y a todas las víctimas del nazismo de España acordado por el Consejo de Ministros del Gobierno de España en 2019. La fecha coincide con la liberación en 1945 del campo de Mauthausen, en Austria, por las tropas aliadas norteamericanas. Allí, las banderas republicanas españolas habían sustituido a las insignias nazis y el portón de entrada estaba cubierto por una gran pancarta en la que se leía: “Los españoles antifascistas saludan a las fuerzas libertadoras”.
El 5 de mayo conmemoramos el Día de Homenaje a los españoles deportados y fallecidos en
Mauthausen y en otros campos y a todas las víctimas del nazismo de España acordado por el Consejo de Ministros del Gobierno de España en 2019. La fecha coincide con la liberación en 1945 del campo de Mauthausen, en Austria, por las tropas aliadas norteamericanas. Allí, las banderas republicanas españolas habían sustituido a las insignias nazis y el portón de entrada estaba cubierto por una gran pancarta en la que se leía: “Los españoles antifascistas saludan a las fuerzas libertadoras”.
Más de 9.000 españoles y españolas fueron deportados a los campos de concentración nazi, de los cuales 5.500 fueron asesinados. Hubo seis millones de desplazados tras la ocupación alemana de Francia, de los cuales más de un millón y medio fueron enviados como trabajadores forzosos a los campos del Tercer Reich.
Desde el verano de 1940, los trenes cargados de esclavos se fueron llenando de catalanes, vascos, andaluces, aragoneses, madrileños, manchegos, gallegos… La mayoría habían trabajado en la construcción de las fortificaciones y defensas francesas y eran muy apreciados como obreros especialistas.
El trabajo en los campos era un espectáculo diario donde el castigo y la humillación era más
importante que la producción, marcado por las necesidades económicas y bélicas del Tercer Reich. Además de la cantera, los españoles trabajaron en la construcción de Gusen, el más terrible y mortífero de los campos. También fue el lugar donde les llegó la muerte.
En Mauthausen todos fueron considerados criminales de guerra, delincuentes e indeseables con independencia de su nacionalidad. Los españoles que habían sobrevivido al infierno compartían otra condición. No podían pedir amparo a ningún gobierno, eran apátridas. El regreso a su lugar de origen fue imposible por lo que su encierro fue de por vida. Perdieron las dos guerras en las que combatieron, no fueron reconocidos como prisioneros de guerra, ni como combatientes, ni mucho menos como refugiados.
Esta es la historia de los perdedores, de los que fueron esclavizados por el Tercer Reich. La mayoría murieron allí, muy lejos de su lugar de nacimiento, solos y desaparecieron de la memoria colectiva apenas siendo un número y víctimas del odio.
Esta es la historia también de las casi 35.000 personas asesinadas y las 77.000 heridas en Gaza desde Octubre y de los que hoy sufren guerras ardientes en Ucrania, Sudán, Etiopía, Afganistán…
En 2016, de manera institucional, iniciamos los actos conmemorativos para homenajear a los trece vecinos de nuestra ciudad que fueron deportados al campo de Mauthausen y del que tan solo cinco salieron con vida y un año más, sin ese apoyo institucional, recordamos a Sergio Monzón Albendea, Cesáreo Hidalgo Bustos, Laureano Muñoz Fernández, Sabino Martín García, Antonio Belmonte García, Julián López Nájera, Julio Pérez Nieto, José Jaén Martínez, Román Aranda Chacón, José Arminio del Valle, Recaredo Díaz Mejía, Ángel López Chacón y Alfonso Díaz Salazar.
Desde el Ateneo de izquierdas y el PSOE de Aranjuez, queremos rendir tributo a la memoria de las víctimas y sus familiares, reclamamos justicia para con su memoria y ratificamos nuestro compromiso de luchar contra el antisemitismo, el racismo y en defensa de la democracia. Es nuestra obligación dar cumplimiento a los valores democráticos de memoria, justicia, reparación de las víctimas y sus familiares y compromiso de no repetición de dichas atrocidades y crímenes.
También estamos obligados como sociedad a crear un instrumento de defensa de la democracia constitucional como forma pacífica de convivencia. Los tiempos actuales cargados de crispación, odio, mentira y desinformación, provocados por los herederos del franquismo, suponen un grave ataque a nuestro estado democrático. Es por eso que debemos exigir el respeto a quienes padecen persecución o violencia, por razones políticas, ideológicas, de pensamiento u opinión, de conciencia o creencia religiosa, de orientación e
identidad sexual.
Ahora que se derogan las Leyes de Memoria democrática para falsificar la historia adornándola de concordia, tenemos que recordar también que durante 40 años no hubo concordia, hubo calles y plazas en honor a los criminales. Se colocaron placas de mármol con el nombre de sus caídos en las fachadas de las iglesias y asesinos enterrados con honores en basílicas. En cambio, los vencidos fueron criminales sepultados en fosas comunes, cunetas, enviados a campos de concentración y asesinados en las cámaras de gas.
Queremos manifestar nuestro agradecimiento y recuerdo a los familiares españoles y franceses de nuestros trece vecinos de Aranjuez que nos acompañan cada año en los distintos homenajes, en especial a Violeta, Libertad y Pili que han fallecido en los últimos años, os tenemos muy presentes. A la Amical de Mauthausen, a las tres asociaciones de Recuperación de la Memoria de Aranjuez (Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Aranjuez, la Asociación para la Conservación de la Memoria de los Fusilados y Represaliados en Aranjuez tras la Guerra Civil y la Asociación la Casa Negra), sindicatos y fuerzas políticas progresistas, a Concha Berzosa, Héctor Anabitarte y Ricardo Lorenzo, al historiador Carlos Hernández de Miguel y a todos los que de manera individual se han ido sumando para que su memoria siga vida.
Por nuestros 13 de Mauthausen y los 9.000 españoles deportados que vuelven a casa cada
5 de mayo nuestro más sincero recuerdo y nuestro más sentido homenaje.
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