Editorial: entre pandemias

 Son muchas las preguntas y quejas, sobre todo éstas ultimas, las que nos llegan de manera privada sobre diferentes aspectos de la vida cotidiana del vecino de Aranjuez. Esta vez queremos fijarnos de manera especial por todo lo que estamos sufriendo con el Covid19 y el incremento espectacular de contagios.

A finales de febrero tomaba forma una situación y un escenario mas propio de pelicula apocaliptica americana que del mundo real en pleno siglo XXI, un virus del que poco sabíamos, creo que a día de hoy seguimos igual, se instalaba en nuestras vidas y dejaba una cantidad de fallecidos hasta el día de hoy del que jamás sabremos la cifra exacta, porque hasta nuestros políticos se han permitido la falta de moral de jugar con ellos. Una situación que nos ha cambiado y ha cambiado nuestra libertad personal en todos los órdenes de la vida, incluso el de relacionarnos con nuestros seres mas queridos. Hemos pasado de estar recluídos en casa saliendo a diario a aplaudir a nuestros sanitarios que se estaban dejando la vida por salvar la nuestra, al día de hoy en el que como criaturas bendecidas por la inmunidad fisica, pasarnos por el arco de triunfo todas las recomendaciones sanitarias para evitar contagios. 

Vemos como nuestros vecinos pasean tranquilamente por la calle sin mascarilla o con ella mal puesta, como nuestros jóvenes hacen caso omiso y se besan cuando se reencuentran, como nuestros parques se pueblan de usuarios, muchos de ellos menores, sin medidas de seguridad ni nada que se le parezca, como se organizan botellones, como nos juntamos los que nos viene en gana en un cumpleaños, comida familiar o cualquier celebración, eso sí, todos sin mascarillas y sin distancias, como si nos hubieran hecho una PCR a la entrada con resultado negativo.

Y todo esto ante la pasividad de la policia en Aranjuez y de nuestras autoridades locales que tras meses sin dar señales de vida, salvo alguna entrevista en radio de nuestra alcaldesa, ha mantenido un municipio ciego y sordo de información oficial, nada que ver con municipios cercanos en los que la información de las actividades tanto en limpiezas, datos, ayudas etc han sido constantes. En Aranjuez salvo poner un papelito en el reparto de mascarillas donadas por una empresa, en la memoria del ciudadano no queda otro recuerdo mas que esa ausencia de presencia institucional.

Atrás quedó el titular de que se iban a repartir kits a empresas, previa solicitud eso si, por el que hemos preguntado en diferentes ocasiones sin obtener respuesta, o el detalle de donde y de que manera se han invertido los fondos que se iban a destinar por la no celebración de las fiestas.

Entre tanto el vecino sigue viendo como Aranjuez sigue cuesta abajo comercialmente hablando, sigue viendo sus calles sucias, sigue sin ver orden policial en las calles, sigue viendo como dia a día crece la inseguridad con la quema de contenedores y el robo de vehículos pero sobre todo lo que ve es una corporación mandatada por una Alcaldesa que se encuentra literalmente fuera de juego.