Más de 120 familias han hecho llegar a la gestora de las viviendas una contraoferta para seguir en sus casas en los mismos términos que estos nuevos contratos. A estos vecinos solo se les ha dado la posibilidad de un nuevo contrato de 499€ mensuales más gatos (sin definir) más IBI porcentual prorrateado en 3 años, o no han recibido ninguna notificación hasta el día de hoy. Y junto a ellos, otras centenares de personas asisten a un proceso que entra en su fase decisiva: Más Madrid-Somos Aranjuez insta a la alcaldesa a que ayude a todos los vecinos a conseguir más contratos en esas condiciones asumibles, y que no convierta el asunto en limosna para hacer rédito con la acuciante necesidad de vivienda de la ciudadanía de Aranjuez.
Ni alcaldes ni alcaldesas, ni diputados, ni concejales, ni consejeros, ni políticos de ningún partido. Si los vecinos afectados por problemas e irregularidades en sus contratos de alquiler de vivienda en el PAU de La Montaña son capaces de desbloquear su situación será exclusivamente por su concienzuda y comprometida labor colectiva, por encima de colores políticos. De momento, más de 40 familias han conseguido firmar o están en proceso de firma confirmada un contrato nuevo en base a un precio de 400€ mensuales por un periodo de un año más 6 de prórroga decidida, año a año, por el inquilino. Estas son unas condiciones económicas y de reconocimiento de derechos que, sin ser ideales, sí serían asumibles para la mayoría de los actuales vecinos de este barrio.
Ya en enero Más Madrid-Somos Aranjuez exigía a la alcaldesa de Aranjuez, María José Martínez, y a todo el gobierno municipal, que se dejase de "reuniones" opacas con la empresa propietaria de los pisos de alquiler social de La Montaña y que acelerase los mecanismos existentes en la Oficina de Intermediación de Vivienda y en la Oficina de Consumo municipales para ayudar a estos inquilinos y plantear soluciones colectivas, para todas las familias. Oídos sordos. Un mes después, sólo el esfuerzo colectivo y coordinado de la Plataforma de afectados y la generosidad de todos y cada uno de los vecinos está permitiendo mejoras puntuales que se plasman en nuevos alquileres dignos, a un ritmo que debe acelerarse.
Cada mínimo avance, noticia o novedad que ayuda a extender los alquileres y mejorar las condiciones de los contratos se comunica a toda la colectividad para conseguir soluciones que lleguen a la mayor cantidad posible de familias. Y esta es la actitud que Más Madrid-Somos Aranjuez exige a todos los partidos políticos e instituciones, empezando por el Ayuntamiento de Aranjuez. Los vecinos, todos los vecinos, quieren y merecen soluciones. Y las están eligiendo ellos, no a través de rifirrafes politiqueros que no llevan a ningún sitio. Por eso la obligación de los poderes públicos, sobre todo el más próximo que es el Ayuntamiento, es acompañar esta labor vecinal colectiva y facilitarla en lo posible.
De momento, se ha cerrado para la próxima semana una reunión entre Plataforma, Ayuntamiento, Comunidad de Madrid e inmobiliaria. Todo lo que no sea extender estos nuevos contratos a todas las familias interesadas en seguir en sus viviendas será un fracaso achacable a la gestión del Partido Popular, Ciudadanos y Vox, que han abierto las puertas de Servicios Sociales para hacer una especie de casting de menesterosos. El caso de los alquileres del PAU no es una limosna que se otorga graciosamente a aquellos que tengan más suerte o den más lástima. El caso del PAU es el de una inmobiliaria que debe poner encima de la mesa unos contratos de adhesión asumibles y dignos para nuestros vecinos, y cada avance que pueda eliminar abusos debe ser para todos. Ésa debería ser la prioridad política número uno, y en ese escenario deberían trabajar los servicios municipales.
Mientras sigue avanzando el proceso, Más Madrid-Somos Aranjuez vuelve a animar a los inquilinos afectados a seguir actuando colectivamente en lo posible, y a utilizar y exigir rapidez en la atención de los servicios municipales de mediación y consumo a disposición de la ciudadanía en el Ayuntamiento. La generosidad que está demostrando la gente del barrio de La Montaña merece el máximo respeto por parte de las instituciones y los partidos políticos. Y, en caso de que el proceso termine satisfactoriamente para la mayoría, debe servir como ejemplo para otros conflictos similares en Aranjuez, y fuera de nuestro municipio. Vídeos, fotos, declaraciones, siglas... eso entorpece, dificulta y, lo peor, desmoviliza.
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