Editorial: cambios de cromos o de chaquetas

Comienza la campaña para las elecciones municipales, la noche de ayer se dio el pistoletazo de salida con la pegada de carteles y aunque ya se conocían desde hace semanas los cabezas de cartel la pegada no ha sorprendido a nadie.

El primer análisis a pie de calle lo que deja es la amplia oferta de la cartelera, y es que son diez los partidos que se presentan de los que dudo mucho que algunos de ellos siquiera sepan que son los caballitos del Teresiano, pero esto es lo que tiene la política del siglo XXI, los paracaidistas, las defenestraciones están a la orden del día y cambian líderes de partidos en la penumbra y el silencio para que no se muevan mucho las corrientes que creen les llevarán a buen puerto político.

Ultimamente me han preguntado mucho por como veo el panorama político y qué hacer para aprovechar la corriente a favor del voto nacional o en su defecto que se puede hacer a modo de toniquete que frene la sangría de votos que el PP ha tenido en las generales en Aranjuez. Y es que en política está todo inventado, el votante no tiene memoria histórica, padecemos normalmente una amnesia selectiva que no nos deja ver mas allá de unos meses atrás. Esto lo saben nuestros políticos, de ahí su repentino interés en hacernos sentir parte de sus vidas entrando a respondernos en determinados comentarios en redes sociales, respondernos e incluso diciéndonos que tomarán nota, y eso claro está enriquece nuestros egos y nos hace creer formar parte de un todo cuando llevamos años siendo parte de un nada.

El ambiente está claro que está muy revuelto y que nadie tiene claro eso de los porcentajes, de las horquillas de voto que pueden darnos un concejal que suponga para alguno de los integrantes que forman parte de alguna candidatura, un sustento laboral durante cuatro añitos mínimo, es lo que tiene la política, pura vocación.

Los acuerdos y reuniones se están produciendo, igual que llevan mucho tiempo atrás produciendose las ofertas de integración de un partido en otro, el que lo niegue es un necio/a. Y es que no hay que ser Tezanos para vaticinar la inclusión de nuevas siglas en la corporación y muy probablemente la extinción de alguna otra, el tiempo dirá.