LOS SOPORTALES Y ALREDEDORES DE LA PLAZA DE LA MARIBLANCA SIGUEN PRESENTANDO UN ESTADO PELIGROSO E IMPROPIO DE UNA CIUDAD PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD.
Losas a punto de desprenderse, puntos de luz arrancados con los cables colgando, alcorques llenos con las piedras desprendidas del solado y problemas de accesibilidad siguen patentes y sin solucionarse tras casi un año después de nuestra anterior denuncia.
La plaza de San Antonio, uno de los puntos monumentales neurálgicos de nuestra ciudad Patrimonio de la Humanidad, sigue presentando importantes desperfectos que un año después de ser denunciados por acipa (septiembre de 2014) siguen sin solucionarse. En este tiempo se han desarrollado las obras del acceso norte y se han reparado en parte los bordillos de piedra caliza junto a la calzada de la Carrera de Andalucía.
Sin embargo, los desperfectos en la piedra que recubre el techo de los soportales siguen ahí, transmitiendo una penosa imagen de dejadez y peligro, acrecentada por la cercanía de la oficina de turismo, ya que es uno de los primeros sitios que visitan los turistas. Por si fuera poco, los puntos de luz siguen también sin ser repuestos, o al menos tapados para evitar que alguien toque los cables o cometa actos vandálicos.
Actos vandálicos que encuentran el caldo de cultivo perfecto amparados en la oscuridad reinante en los arcos cuando cae la noche.
En los soportales del lado oeste la situación es muy similar, con idéntica situación de las piedras que recubren el techo de los soportales. Y no mejora en los aledaños, ya en la calle San Antonio, donde el solado de canto rodado de la zona de aparcamientos sigue levantado, haciéndose los socavones cada vez más grandes, con los alcorques llenos de piedras y las malezas cubriendo la base de los arcos de entrada a la Plaza, en cuyo lateral ha llegado a crecer una higuera, evidenciando una dejadez continuada en el tiempo.
Y si esto ocurre en una zona monumental que debería tener un mantenimiento continuado y ejemplar, qué se puede decir de aquellas zonas que acaban de ser renovadas y que presentan ya importantes problemas, sobre todo a nivel de accesibilidad de personas con movilidad reducida. Sucede en los aledaños de las recién remodeladas Calle de la Reina y Plaza de Santiago Rusiñol. Las personas con problemas de movilidad que paseen por el lado derecho de la Calle, junto a la verja del Jardín del Príncipe y quieran cruzar hasta Príncipe o Infantas por la Plaza se encuentran con la existencia de un borde de piedra recrecido y de fondo acanalado para recoger las escorrentías de agua que llega hasta el final de la calle.
Este borde no es de altura pronunciada pero supone una barrera arquitectónica poco explicable en una obra que acaba de ser terminada. Como también es poco explicable que la acera derecha del Puente Barcas en sentido Madrid tenga las farolas situadas justo en mitad de la misma.
Desde acipa esperamos que el nuevo gobierno exija a Patrimonio Nacional, dentro del ámbito de sus competencias, el arreglo de estas deficiencias reseñadas en la Plaza de San Antonio, pues los desperfectos denunciados hace un año no han sido subsanados de ninguna forma y no es propio de una ciudad Patrimonio de la Humanidad como Aranjuez tener en tan mal estado sus zonas más monumentales.
Asimismo, solicitamos que se solucionen los problemas de accesibilidad antes reseñados y detectados en las zonas recientemente remodeladas con motivo de la reforma del acceso norte.
n.p. Acipa Aranjuez
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